El viernes 19 de abril, la docente de la carrera de Derecho, Tania Álvarez Gantier, presentó un sugerente libro “Educación Superior Femenina: Como desencadenante de la lucha por los derechos civiles y políticos de la mujer”. El documento en sí es un estudio que forma parte del doctorado realizado por Álvarez, devela las condiciones que intervienen en el ingreso de la mujer a las universidades, en un contexto social adverso que otorgaba a la mujer roles definidos  en el espacio privado del hogar; es decir, la mujer para ser parte de la educación superior, tal cual narra esta investigación, tuvo que enfrentar los prejuicios sociales y al Estado patriarcal.

La autora del libro hace un repaso sobre las influencias del pensamiento político y filosófico que impulsaron a la mujer boliviana en general, y chuquisaqueña en particular, a continuar su formación universitaria. Tanía Álvarez no separa los derechos políticos de los civiles de la mujer, más bien los presenta bajo una relación intrínseca, por lo que no se podría entender el uno sin el otro.

Este estudio describe varios pasajes importantes en la lucha de la mujer chuquisaqueña por una sociedad inclusiva; entre los hallazgos más destacados de la investigación resaltan los nombres de las primeras mujeres que ingresan a la universidad; entre ellas, Aurora Cors de la Tapia, que fue la primera estudiante de la Universidad de San Francisco Xavier en el instituto Obstetra de la facultad de Ciencias Médicas, graduándose en 1922 como Matrona Obstetra.

Cuatro años más tarde, se gradúa Amelia Chopitea Villa como primera médico de la facultad de Ciencias Médicas de la Universidad de San Francisco Xavier. Se trata de la primera mujer que recibe ese título a nivel nacional; tres años más tarde, lo haría de igual forma, su hermana Elia Chopitea Villa, constituyéndose en la segunda médico del país.

Carmen Suazo Velazco es la primera mujer que ingresa a la facultad de Derecho de San Francisco Xavier en 1925, titulándose años después como doctora en Derecho. También descuella el nombre de Agar Peñaranda Oropeza que, además de estudiar derecho e idiomas en la Universidad chuquisaqueña, también fue maestra de filosofía. Su participación como intelectual, funcionaria universitaria y militante política de izquierda, hicieron de ella un actor protagónico en las luchas políticas que sacudió la historia nacional hasta el último día de su vida (diciembre de 1977).

El acto de presentación del libro se realizó en el Salón de Honor de Rectorado, ante un público ávido por conocer la explicación de Álvarez  en torno al contenido del libro. En la oportunidad el rector, Walter Arízaga y el vicerrector, Erick Mita, felicitaron a la autora por revelar a quienes protagonizaron la lucha de las mujeres universitarias a lo largo del siglo XX.

JCV