El nuevo acceso que comunica el edificio histórico de la Universidad con la Casa de la Libertad, inaugurado el pasado lunes 4 de agosto, incluye el proyecto de refuncionalización de la Biblioteca Central de la Universidad y el traslado a esos ambientes de los archivos del Centro Documental Bibliográfico e Histórico de la Universidad.
En el primer caso, la Biblioteca Central -cuya fundación se remonta a fines de la década de 30 del siglo XX- sin perder su esencia educativa y cultural será una institución que propicie la lectura, la investigación, las manifestaciones artísticas, la confrontación de ideas y la construcción de pensamiento; son estos elementos que conformarán la atmósfera de este espacio que responderá a las demandas del siglo XXI, en tanto acceso al conocimiento y a la cultura, bajo la comprensión que el libro no solo es un elemento físico que transmite información; más bien, es una pieza de alto valor simbólico y cultural.
La arquitecta Carla Jaliri, responsable del proyecto “Puesta en valor de la Manzana Jesuítica” y de la refuncionalización de la Biblioteca Central, explicó que la refuncionalización incluye salas de lectura, espacios para el acceso a las bibliotecas virtuales, ambientes para las manifestaciones artísticas y el descanso de los investigadores.
Sobre el tema, el vicerrector, Erick Mita, señaló que Biblioteca Central, a partir de su refuncionalización, estará enfocada en el apoyo a la investigación, esto por la riqueza bibliográfica que guarda; del mismo modo, destacó que el Centro Documental de la Universidad, al contar con archivos de los periodos colonial y republicano vinculados con la Universidad y las instituciones de Sucre, es una entidad que fortalecerá aún más la investigación histórica que, muy pronto, ofrecerá un servicio de calidad a los historiadores de Bolivia y el mundo.
JCV